Mi primer matrimonio fue con Silvia Zotta. Vivíamos en un pequeño departamento en el barrio de Caballito y a pesar de no tener un centavo fue, para ambos, un período de mucha creatividad.
Aunque nuestras disciplinas no se cruzaban, compartíamos una mirada ácida y profunda. Sin envidias, nos inspirábamos uno del otro, casi como hermanitos degenerados.
El conjunto de retratos que conforma la primera parte de este archivo, nació de una sesión fotográfica que realicé para mi brevísima carrera como actor.
Y el segundo ciclo, bautizado “Reunión de los domingos“, fue destinado al entrenamiento del gesto y la velocidad. Muchos de estos ejercicios resultaron ser bocetos para futuras esculturas. Porque Silvia será recordada siempre como ceramista.
Cuando nos separamos se fue a vivir a Italia, donde realizó la mayoría de sus trabajos. Recibió premios y con sus obras recorrió Europa y Asia. Cada vez que regresaba a Buenos Aires no dejaba de visitarme en el pequeño departamento en el barrio de Caballito, donde aún vivo.
El modelo automotor de la compañía Ford, que ingresó al mercado en 1957 como “vehículo para toda la familia”, empezó a fabricarse en Argentina cinco años después y alcanzó records de ventas.
En un comienzo fue utilizado por la policía y mas tarde, en la década del 70, como móvil de los grupos represivos paraestatales. Además de convertirse en uno de los íconos del terrorismo de Estado por su utilización en operativos de secuestro y desaparición de personas durante la dictadura militar, el Falcon simboliza la complicidad civil en ese proceso represivo.
En julio de 2014, con el Estado nacional como querellante, comenzó el juzgamiento a tres ex directivos de la empresa por su intermediación en el secuestro y la desaparición de al menos 25 delegados de la fábrica de Pacheco entre marzo y agosto de 1976.
En la instalación “Autores Ideológicos” –que se exhibe en el hall del Conti- Javier Bernasconi, Omar Estela, Marcelo Montanari, Marcela Oliva, Luciano Parodi y Margarita Rocha presentan un Falcon desarmado, pintado de blanco y resignificado como obra de arte.
Con María Ines, Cecilia y Lucía.
Premio Eduardo Pavlovsky a Cecilia Rossetto.
Reconocimiento de la Secretaría de Derechos Humanos.
Fotografías: Ana María Ferrari.
Por sugerencia a mano armada de mi médico, debo salir a caminar.
Confieso que no resulta ser la tarea más estimulante que transito -nunca mejor dicho-. Así que esquivando contemporáneos y baldosas flojas decidí sumar un objetivo a la rutina.
Como quién abandona pistas en un crimen, a partir de hoy, iré soltando ejemplares de mis libros, con la petulante intención de encontrar lectores.
Donde la impudicia me lo permita, dejaré la carnada.
Coordenada de hoy: Calasanz y Pedro Goyena.
Harta de requisitos, Cenicienta se ha vuelto zapatera.
Dumbo hoy es afinador de pianos.
Daisy fue nombrada empleada del mes en el Mc Donald de Constitución.
Y Pinocho puso una playa de estacionamiente.
Paturuzú almuerza con Luciano Benetton.
Gasparín se pegó un palo con la moto, y ya no está entre nosotros.
Por sugerencia a mano armada de mi médico, debo salir a caminar.
Confieso que no resulta ser la tarea más estimulante que transito -nunca mejor dicho-. Así que esquivando contemporáneos y baldosas flojas decidí sumar un objetivo a la rutina.
Como quién abandona pistas en un crimen, a partir de hoy, iré soltando ejemplares de mis libros, con la petulante intención de encontrar lectores.
Donde la impudicia me lo permita, dejaré la carnada.
Coordenada de hoy: Café Havanna. Hidalgo y Arengreen.
Por sugerencia a mano armada de mi médico, debo salir a caminar.
Confieso que no resulta ser la tarea más estimulante que transito -nunca mejor dicho-. Así que esquivando contemporáneos y baldosas flojas decidí sumar un objetivo a la rutina.
Como quién abandona pistas en un crimen, a partir de hoy, iré soltando ejemplares de mis libros, con la petulante intención de encontrar lectores.
Donde la impudicia me lo permita, dejaré la carnada.
Coordenada de hoy: Hidalgo y Díaz Vélez.